El pasado domingo, 27 de septiembre, como todos los domingos, nos reunimos en torno a la mesa del Señor para escuchar su palabra y compartir su pan de vida. Pero la celebración de la Eucaristía en la parroquia de El Salvador tuvo además un sentido particular:
Ante el nuevo comienzo del curso de catequesis de nuestra Agrupación Parroquial, se realizó el rito de envío de aquellas personas que, en nombre de la Iglesia, llevarán a cabo, junto al los Párrocos, la tarea de acompañar a los niños y jóvenes que se encuentran en los cursos de catequesis. Fue un rito sencillo y emotivo, con el que se trató de expresar que los catequistas no actúan en nombre propio, sino en nombre de la Iglesia.