Comenzamos un nuevo curso pastoral. Hemos cargado baterías
durante el verano y es momento de “ponerse en camino” de nuevo.
Como no podía ser de otra manera, nos unimos al objetivo de
toda la Diócesis para este curso, y nos proponemos “ser una Agrupación
parroquial misionera, acentuando la caridad pastoral y el servicio de la
caridad”.
Queremos asumir los acentos del Programa Diocesano de
pastoral 2019-2020:
- Hemos de ser conscientes de que a cada uno nos dice el Señor, como les dijo a los apóstoles, viendo a un grupo inmenso de gente: “Dadles vosotros de comer…”.
- No podemos olvidar la Palabra del Señor: “La mies es mucha y los obreros pocos… Poneos en camino… No miréis atrás… Está cerca de vosotros el Reino de Dios…”.
- Hemos de tomarnos muy en serio nuestro ser de bautizados.
Nos dice el Papa en la Exhortación Apostólica Evangelii
Gaudium:
“En virtud del Bautismo recibido, cada miembro del Pueblo de
Dios se ha convertido en discípulo misionero”.
“Todo cristiano es misionero en la medida en que se ha
encontrado con el amor de Dios en Cristo Jesús”.
“Yo soy una misión en esta tierra, y para eso estoy en este
mundo. Hay que reconocerse a sí mismo como marcado a fuego por esa misión de
iluminar, bendecir, vivificar, levantar, sanar, liberar”.
El Señor nos da una nueva oportunidad para vivir este tiempo
de gracia que nos concede, sirviéndole a él y a los demás.
Mirando al Señor y consultando a nuestros hermanos,
busquemos el lugar donde este curso podamos “trabajar en su viña”.
Desde mi ser de bautizado, ¿en qué grupo puedo hacer
realidad mi compromiso dentro de la Agrupación parroquial?
Que Santa María la Virgen, nos acompañe y nos proteja con su
ternura maternal.
¡¡¡FELIZ CURSO 2019-2020!!!